COMO PURIFICARSE AQUI EN LA TIERRA

 

 

Cuanto más amor des a una persona, más purificado te encontrarás.

 

¿V

osotros queréis saber cómo podéis coger el camino más recto y cómo podéis llegar antes (después de dejar este cuerpo) para no tener que volver más a esta vida, sino a otra vida que sucederá después mucho mejor?

·        Lo primero es hacer la voluntad de Dios: EL ARREPENTIMIENTO. Debéis mirar a vuestro corazón y ver cómo está. Debéis dejar ese orgullo, habéis de cambiarlo por humildad, echando fuera la envidia y entrando caridad. Debéis echar todo el odio que tengáis en el cuerpo y rellenarlo con ese amor que yo os he hablado y os he traído de Dios Nuestro Padre.

·        Solamente falta que cambiéis la mentira por la verdad.

            Una vez que hayáis hecho todo esto ya habéis entrado en el sendero de la virtud.

            El camino es muy, pero que muy largo. Y esa es la meta que tenemos todos: queramos o no queramos.

            Si alguno se arrepiente, que se arrepienta de corazón, que no me lo diga a mí, que se ARREPIENTA de corazón, que no tiene más que llegar y decir: “Yo quiero el PERDÓN, yo quiero fuerza, yo quiero...” Lo que sea menos dinero.

            Porque envidia, es una tontería tenerle envidia a alguien. No conozco a nadie que sea feliz porque tiene mucho dinero. Cuanto más tienen, más complicaciones hay en casa.

            Lo primero que hay que hacer es el ARREPENTIMIENTO, y después debéis venir para que se os perdone, pero también tenéis que PERDONAR vosotros. Porque si vosotros queréis ser perdonados tenéis que perdonar también vosotros mismos.

            Me referí a que hay que estar PURIFICADOS para pasar a otra Patria más feliz, a otra Patria más hermosa. Y qué mejor que empezando por ahí: trabajando en la Obra y en el camino de Dios.

            Esto es un principio, y nada mejor que lo que yo os estoy diciendo ahora. Así es como habéis de seguir, porque esto, además de conduciros por el buen camino, es lo feliz que os hará a cada uno que lo intentéis.

            ¿Hay algo más bonito que hacer el bien, que ayudarle a vuestros vecinos, a vuestros hermanos, a vuestros amigos, de cualquier forma?

            ESTO ES PARTE DE LA VOLUNTAD DEL PADRE.

            Pensad que el perdón es una cosa. Yo os perdono a vosotros y vosotros tenéis que perdonar a los demás. Pero esto es muy diferente a la propiaELEVACIÓN del día de mañana: ESO HAY QUE GANÁRSELO.

 

 

Palma de Mallorca, 14 de junio de 2003

 

Y

o NO he venido a curar a las personas, yo he venido a enseñaros a amar y a perdonar y, sobre todo, a liberaros de la esclavitud del pecado, que es lo más importante. Lo que muy pocos pueden hacer, por no decir ninguno. Entonces, ese es mi trabajo.

            Pero claro, me duele ver a un niño que está padeciendo, o un anciano u otra persona. Y, si puedo, lo hago. Son muchos… (aunque quiera yo decir que no, no puedo, porque entonces os mentiría), pero son muchos los que a grandes distancias… los que se alivian y los que están mejorando.